Com s’esbrava la mala llet, Antònia Carré-Pons
«Mira qué montaña de impedimentos que hay aquí. Han salido a tomar el fresco”
Antònia Carré-Pons
Nunca había leído a Antònia Carré-Pons, así que decidí leer su libro Com s’esbrava la mala llet, publicado por Club Editor. Acercarse a ella leyendo los cuentos publicados en este libro es una buena formula para conocerla como escritora.
Descubrí a una Antònia Carré realista pero divertida. Si bien todas las historias están protagonizadas por personajes pertenecientes a la tercera edad, Antònia Carré trata temas universales en sus cuentos que nos es común a todos: la soledad, el amor, el sexo, la amistad, la muerte…
La escritora se sirve de la narración de escenas que podrían vivir nuestros mayores, como excusa para hacernos reflexionar sobre una visión más profunda de la vida. Antònia se dedica a narrar las experiencia de sus personajes partiendo de pequeñas escenas cotidianas: un baile, el padre que recibe la visita de su hijo en la residencia, unos últimos instantes de vida dejando inacabado un trabajo manual…En definitiva, pequeñas cosas de la vida diaria que podrían vivir cualquiera de nuestros mayores, y que son esas vivencias las que nos hacen pensar en los temas más profundos que nos atañen a todos.
Me ha gustado leer a Antònia Carré-Pons por varios motivos: primero las historias narradas: ni endulzadas ni mitificadas sino reales con un punto de vista reflexivo muy interesante; segundo, he descubierto a una autora que volveré a leer en cuanto tenga ocasión, y, tercero, la edición “de bolsillo” de Club Editor, hace que la lectura sea práctica de llevar a cualquier lugar, por lo que se puede leer cómodamente en desplazamientos cortos urbanos como el tren, el metro o el autobús.
Sin embargo, Com s’esbrava la malla llet puede resultar de difícil lectura para personas sensibles a las vivencias propias de la vejez. Aunque es precisamente por eso por lo que yo recomiendo leerlo, porque la naturalidad con la que se narran esas vivencias es la que hace que el libro sea especialmente bello de leer.
Lo recomendaría leer a mucha gente, pero quiero centrar mi recomendación en los cuidadores de ancianos y a lo hijos con padres de edad avanzada, puesto que la empatía y franqueza con la que la escritora trata las historias de cada cuento nos hará tener un punto de vista mucho más cercano a las vivencias que en dicha edad avanzada se viven. También recomiendo leerlo, muy especialmente, a las personas de avanzada edad, porque les robará una sonrisa complice en cada cuento y les hará sentir más acompañados a aquellos que sientan la soledad con más perseverancia.